No recuerdo un año con tanta mala prensa como 2020, debe ser el más repudiado de los últimos tiempos. Y no es para menos pues, claramente, ha pasado un huracán por nuestras vidas, que nos impactó a nivel emocional, laboral, afectivo. Pero ya es hora de dejar de achacarle la culpa de todos nuestros pesares al año que pasó, y comenzar a enfocarse en lo que vendrá.
De la misma manera, también es bueno reconocer que las expectativas que estamos poniendo en 2021 son, en un punto, algo exageradas. Tendemos a creer que a partir del 1 de enero todo se va a solucionar como por arte de magia, que al cambiar de calendario, vamos a recuperar la tranquilidad, la normalidad que perdimos. ¡Qué presión, pobre 2021!
La realidad es que no sabemos si este será un año mejor que el que pasó. Lo que sí sabemos, lo que sí está en nuestras manos, es qué podemos hacer nosotros para que sí lo sea. Está en nuestras manos apropiarnos de la parte que nos toca en la tarea de crear un mejor año, y dejar de poner afuera la culpa o la solución de todos nuestros problemas.
Ahora es tiempo de avanzar, de moverse de la queja y comenzar a construir, para que 2021 sea un año de renacer, de evolución. Así que, luego de haber aprendido y trascendido los desafíos de 2020, se trata de preguntarnos qué vamos a hacer nosotras para que el próximo sea un año grandioso.
En el episodio 11, te invito a reflexionar sobre tus propósitos para los próximos 12 meses, desde una perspectiva diferente: con compromiso, decidida a avanzar sin miedo, sin culpar al afuera, determinada a accionar para manifestar así tu mejor realidad. Escúchalo aquí o en tus plataformas favoritas.